EL MES DE NOVIEMBRE DE DIVERSOS AÑOS…

El mes de noviembre, en diversos años, se ha caracterizado siempre el recuerdo que a través de los días que van entre los 20 y 28, por ciertos y determinados eventos que han sucedido.
Vamos por Orden:

«Cuánto ha ocurrido, muchos de vosotros no habían nacido todavía, otros existían pero en ese tiempo no eran conscientes de las revelaciones mesiánicas, otros aun existían y fueron unidos a los más adultos, ya conocedores de la obra Universal, sin embargo tenían una joven edad. El 24 de noviembre de 1978, fue injustamente detenido EUGENIO SIRAGUSA, dando así inicio a la más grande oleada de avistamientos en aquel tiempo de TRAZADORES MAGNÉTICOS (no ovnis) en apoyo de su inocencia, la cual se confirmó con la absolución a fórmula plena,  porque el hecho no existe, incluso por el tribunal de
Catania 5 de abril de 1982» (continuación)

https://pesolex.com/it/il-suo-piu-illustre-messaggero-del-cielo-del-xx-secolo/
Vuestro más ilustre mensajero del CIELO del siglo XX

-La crisis que desde hace tiempo  ATENAZA NUESTRO PLANETA es a nivel global, tocando todos los aspectos que caracterizan la vida sobre la tierra especialmente el de un conflicto nuclear. Esta circunstancia nos conduce a proponerles todo lo que Eugenio, por un puro acto de amor, que desde entonces propuso en el lejano 1979 a la atención de todos los poderosos de la tierra, seguramente hoy podemos deducir, que la actualidad es peor  que ayer!

http://www.nexusedizioni.it/it/CT/stoltenberg-vuole-la-nato-in-guerra-putin-ma-chi-e-il-mandante-4901# STOLTENBERG QUIERE LA OTAN EN LA GUERRA. PUTIN: PERO ¿QUIÉN ES EL CLIENTE?

http://terrarealtime.blogspot.it/2015/11/i-nuovi-siluri-nucleari-russi-possono.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed:+TerraRealTime+(TERRA+REAL+TIME)
LOS NUEVOS TORPEDOS NUCLEARES RUSOS PUEDEN GENERAR TSUNAMIS QUE BARRERIA TODA UNA CIUDAD COSTERA

ONU Declara Inicio Tercera Guerra Mundial 2015

COMUNICADO  DEPOSITADO  ANTE  NOTARIO  EN  VARIOS  PAISES  Y  ENVIADO  A  LOS  JEFES  DE  ESTADO  DE  LAS  SUPERPOTENCIAS  Y  AL  PAPA  JUAN  PABLO  II,    EL  AÑO  1979.

“ No soy un mitómano ni un hombre de ciencia-ficción. No soy un exaltado, ni un mentiroso, ni un ignorante. Soy un “contactado” con el cometido de divulgar cuanto me es concedido por Quien, por lo que sé, posee el poder absoluto en el cielo y en la tierra.

Este cometido que desarrollo desde hace 30 anos, está cargado de renuncias y sufrimientos, de luchas y amarguras. A pesar de todo no he hincado la rodilla, venciendo temores y odios, incomprensiones y sutiles persecuciones.

Este acto que cumplo es quizá el último y el más “importante” de mi misión, de mi incondicional amor hacia la Humanidad de este Planeta. Tengo el sagrado deber de hacer notar a los Señores, que una fuerza inimaginable y con poderes impensables, vigila constantemente y activamente el desarrollo de la grave situación, creada con la loca carrera de armamentos nucleares y la proliferación, siempre creciente, de este orden de destrucción y de muerte.

La presencia en el Planeta de estos Señores del Espacio, mira principalmente, a impedir una degeneración capaz de aniquilar inexorablemente la vida en este mundo. Es de mi conocimiento, que entra dentro de sus posibilidades, un forzado condicionamiento y una radical “mutación” de la actual situación, con el fin de evitar que se repita una enorme catástrofe que eliminaría, totalmente, el hálito de vida de este Planeta.

Es también verdad, por cuanto yo conozco, que su misión se limita al especifico cometido de “detener la actual progresiva involución”, ya peligrosa para la estabilidad de los equilibrios cosmofìsicos y cosmodinámicos del Sistema Solar.

Comprendo hasta qué punto es difícil dar crédito a cuánto, a través de este escrito comunicado    digo y también que sea difícil interpretar realmente este acto mío de amor. Como hizo a su tiempo el profeta Jonás, no hago más que repetir su historia y esta vez sin desobedecer. Considero haber hecho mi deber y espero, desde lo más profundo de mi corazón, que Vds, cumplan el suyo “.

Eugenio  Siragusa